Conclusiones

Lo único que puede diferir del consumidor y el producto, es la creatividad libre que se le da para consumirlos y prepararlas al gusto. Si bien, no son un reemplazo completo del consumo de proteínas de origen animal, lo más recomendable es el consumo de estos a cantidades muy reducidas (leche, huevo, carne, etc) para complementarlas con estos otros (arroz, soja, maíz, etc) Y así, lograr una alimentación completa y balanceada. 

Para finalizar, me gustaría agregar el tema del consumo de productos de origen animal, si bien es una problemática muy fuerte que existe en la actualidad respecto al abuso de estos productos, son de gran importancia en nuestra alimentación, con ello nuestra salud. En mi opinión no se deberían de eliminar por completo de nuestro consumo, pero sí reducirlo considerablemente, especialmente en culturas donde el consumo de carnes es muy ocasional. En Sonora se suele consumir mucho la carne de res, una de las carnes más desfavorables respecto al consumo, ya que se trata de uno de los animales que produce grasas trans, a esto nos referimos, que son difíciles de digerir y con ello, acumulables y dañinas para nuestro cuerpo. Agregando el hecho del consumo frecuente en la vida cotidiana. El consumo de alimentos de origen animal no es insano, al contrario, ayuda notablemente al balance de nuestra nutrición, pero no lo es todo, de hecho, se debería consumir en una cantidad bastante reducida. Por lo que solo nos queda tratar de reducir nuestro consumo, para así reducir de igual manera la explotación de animales y el mal aprovechamiento de recursos. Cuando uno deje de consumir de más, es cuando más saludables nos encontraremos.

¿Te quedaron dudas sobre lo que son los aminoácidos?